La declaración refleja un inusual consenso dentro del episcopado, que durante años mantuvo posturas divididas ante la política nacional. Foto Ap Foto autor
La Redacción
12 de noviembre de 2025 18:38
Los obispos católicos de Estados Unidos emitieron una declaración conjunta este martes en la que expresaron su rechazo a las políticas de inmigración impulsadas por el gobierno de ese país, a las que calificaron como contrarias a la dignidad humana, informó The New York Times.
La postura, aprobada casi por unanimidad durante la conferencia anual de obispos celebrada en Baltimore, constituye la acción colectiva más firme de la jerarquía católica estadunidense en defensa de los migrantes y una crítica abierta a las tácticas de deportación que aplica Washington.
Aunque el documento evita mencionar directamente al presidente Donald Trump o a otros funcionarios, su contenido apunta de manera explícita a las medidas migratorias implementadas durante su administración y sus secuelas en la actual política fronteriza.
“Como obispos católicos, amamos a nuestro país y oramos por su paz y prosperidad. Por esta misma razón, nos sentimos obligados ahora, en este contexto, a alzar la voz en defensa de la dignidad humana otorgada por Dios”, señalaron los prelados en su comunicado.
La declaración refleja un inusual consenso dentro del episcopado, que durante años mantuvo posturas divididas ante la política nacional. En esta ocasión, sin embargo, los obispos mostraron unidad al respaldar el llamado del papa León XIV -primer pontífice estadunidense-, quien insistió en la necesidad de proteger a los migrantes y de recordar que “ninguna frontera puede justificar la indiferencia frente al sufrimiento humano”.
Con este pronunciamiento, la Iglesia católica en Estados Unidos reafirma su oposición a las acciones gubernamentales que, bajo el argumento de la seguridad nacional, perpetúan la exclusión y el miedo entre comunidades de origen latino y otras poblaciones migrantes.
El triunfo de un migrante
El alcalde electo de la ciudad de Nueva York, Zohran Mamdani, en imagen de archivo.
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Fabiola Mancilla Castillo*
13 de noviembre de 2025 00:04
La noche del martes 4 de noviembre la ciudad de Nueva York retumbó con el triunfo del demócrata Zohran Mamdani. Con 50.4 por ciento de los votos, superó a su adversario más cercano, Andrew Cuomo, por lo que a partir del primero de enero de 2026 Mamdani será primer alcalde musulmán de una de las ciudades más poderosas del mundo. De origen ugandés y perteneciente a una clase privilegiada, Mamdani, de 34 años, ganó porque su campaña se dedicó a hacer lo que los políticos casi no hacen: escuchar los reclamos más sentidos de las comunidades.
Para las que vivimos en esta ciudad, nuestras quejas son las mismas: el alza de las rentas de los departamentos, lo caro que es comprar la canasta básica y lo difícil que es que cuiden a tus hijos mientras se trabaja en esta urbe de hierro. Tanto en inglés como en español, sus mensajes iban dirigidos a la gente común, como usted o como yo, que todos los días usamos el transporte público, pagamos servicios y, sobre todo, estamos bajo el yugo de la actual administración, que insiste en perseguir a las comunidades con base en un perfilamiento racial –tengas o no documentos–, mientras estamos en Estados Unidos.
Unos días después de las elecciones históricas que favorecieron a las y los demócratas, pareciera que existe una pizca de esperanza entre la comunidad migrante de que todo estará bien, después de tanta persecución. Esta administración de Donald Trump ha sido peligrosa para todas las nacionalidades, pero para las y los mexicanos ha sido brutal. La retórica antimigrante y la criminalización se han concentrado en nosotros; ejemplo de esto es la cifra que da el ICE de 49 mil 341 personas mexicanas detenidas de enero a julio, muy por arriba de Guatemala, Honduras, Venezuela y El Salvador.
En este maremoto de emoción el triunfo de Zohran parece lógico. La crisis que se vive en Estados Unidos hizo que sectores que usualmente no se involucran en la política salieran a exigir un cambio. Zohran ganó cuatro de los cinco condados de Nueva York; ganó 33 por ciento del voto judío, obtuvo el voto joven, el las diásporas africana, latina y asiática, así como el de la población universitaria.
Contrario a lo que ocurrió con la población blanca mayor de 60 años y en el condado de Staten Island – una de las zonas más privilegiadas de Nueva York–, donde ganó Andrew Cuomo. La gran pregunta es qué espera la comunidad migrante indocumentada ante el triunfo de Zohran. La respuesta es clara: justicia. Al cuestionar a Emiliano, del pueblo zapoteco, sobre qué opina del triunfo del próximo alcalde, menciona: “Ojalá detenga todo esto que estamos viviendo con la migración”.
A pesar de que nadie está seguro de lo que pasará en los próximos meses, algunos expertos mencionan que con la victoria de Zohran se tendrá que esperar una mayor presencia del ICE en las calles, así como una potencial llegada de la Guardia Nacional, como ocurrió en Washington, Los Ángeles o Chicago. Lo único cierto es que el triunfo de Zohran nos da esperanza, esa que ya parecía perdida por todas las atrocidades que hemos atestiguado en estos meses.
De madres y padres arrestados frente a sus hijos, de mujeres arrojadas contra el piso por migración sólo por clamar misericordia, de hombres de la construcción manteniéndose por horas en los techos para evitar ser capturados, de gente caminando por la calle que es detenida sin razón alguna, y así podemos seguir por horas mencionando los atropellos a los que nos hemos enfrentado. Por esa razones y muchas otras Zohran ganó; no importó que se nombrara comunista o que sea musulmán. Lo que sí es relevante es que la sociedad estadunidense está dolida, sobre todo la comunidad latina, que ha sido muy golpeada.
Ha sido una gran traición la persecución que se está viviendo, pues después de ser el motor de esta economía, ahora somos perseguidos. Ya no vale ser los que todas las noches limpian los grandes edificios de Wall Street, el cocinero que trabaja en la zona exclusiva de Soho, el repartidor de comida que ayudó tanto durante el covid-19 o el conserje de los departamentos del Upper East Side que todos los días amablemente saludan.
Ahora ya nada importa, pues somos el epicentro del odio de esta administración, a la cual le interesa hablar por horas contra los inmigrantes que tratar de arreglar la economía estadunidense, que se cae a pedazos. Por estas razones era inevitable la victoria de Zohran, que abre la esperanza para que en las próximas elecciones se haga justicia y, mientras eso llega, desde las comunidades celebramos la victoria de un migrante en Nueva York.
*Integrante del Centro de Derechos
Humanos de la Montaña Tlachinollan
COP30: nueva oportunidad para un mundo en crisis
El pasado lunes 10 de noviembre dio inicio la 30 Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP30)en la ciudad de Belém, Brasil . Foto Afp Foto autor
Mario Patrón
13 de noviembre de 2025 00:02
El pasado lunes 10 de noviembre dio inicio la 30 Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP30) en la ciudad de Belém, Brasil, con la presencia de representantes de más de 190 países. Como ocurre en cada edición, la mirada del mundo –especialmente de activistas climáticos y defensores del territorio– se enfoca en esta reunión diplomática que año con año despierta expectativas que poco se traducen en resultados.
Esta edición número 30 se lleva a cabo en un panorama internacional complejizado por las posturas de diversos líderes mundiales, principalmente Donald Trump, quienes no sólo han dado la espalda a los compromisos medioambientales previamente asumidos por sus naciones, sino que han aprobado políticas de explotación de recursos que suponen el recrudecimiento del deterioro ambiental. Vale la pena recordar que, desde la COP21 de París, los países se comprometieron a la realización de planes quinquenales para limitar el calentamiento global a través de estrategias diferenciadas, pero menos de 10 por ciento han cumplido con dichos planes.
Mientras tanto, el calentamiento global y el cambio climático continúan su curso. El Índice de Riesgo Climático Global 2026 señala que en las últimas tres décadas (1995-2024) ocurrieron más de 9 mil 700 eventos climáticos extremos, con un saldo de más de 830 mil muertes en el mundo. El mismo índice señala que 40 por ciento de la población mundial vive en los 11 países más afectados por estos fenómenos, seis de los cuales se encuentran en Centroamérica y el Caribe. Por su parte, el programa europeo de monitoreo climático Copernicus concluyó que 2024 fue el año más caluroso jamás registrado, con una temperatura 1.6 grados Celsius mayor a los niveles preindustriales.
Se estima, además, que el incremento de la temperatura en el Ártico –cuya tasa de calentamiento es mayor al del resto del planeta– alcance 2.4 grados en los próximos cinco años. Con estos resultados y previsiones, y a reserva de las estimaciones pendientes para confirmar tales cifras, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha señalado que estamos próximos a rebasar el límite de 1.5 grados de calentamiento global acordado 10 años atrás en París.
Rebasarlo, en sus palabras, representaría “una negligencia mortal” por parte de la comunidad mundial. En México, cada año atestiguamos catástrofes socioambientales provocadas por los efectos del cambio climático y las deficiencias de muestras infraestructuras y sistemas de prevención. Este 2025, las inundaciones en el norte de Veracruz, Puebla, Querétaro e Hidalgo mostraron una vez más las consecuencias del calentamiento global y el rebasamiento de las instituciones del Estado para responder atinadamente ante fenómenos meteorológicos de esta magnitud.
En términos de la encíclica Laudato Si, lo urgente es refundar nuestra relación como humanidad con la Tierra. El reto es de tal magnitud que necesitamos reformular nuestros propios marcos teóricos y de acción climática. Teóricos como Jason F. McLennan sugieren que conceptos como la sustentabilidad son ya limitados. En el marco de sus proyectos de diseño y arquitectura regenerativa, McLennan plantea la construcción de edificios que no sean simplemente “menos malos para el medio ambiente, sino favorables para el medio ambiente”. Lo que necesitamos, agrega, es la adopción de una economía ya no sustentable, sino regenerativa, que activamente restaure los sistemas ecológicos y sociales.
En el marco de la COP30, las naciones y sus gobiernos tienen una nueva oportunidad para comprometerse efectivamente a la adopción de medidas ya no paliativas, sino integrales que propicien condiciones para una efectiva transición energética, una cooperación internacional justa en beneficio de los países más vulnerables y una apertura frontal al diálogo con organizaciones y comunidades defensoras de la casa común y el territorio.
No se puede perder de vista que son los países del Sur Global los más vulnerables ante los efectos del cambio climático, mientras que los países más ricos son los que más abonan a la generación de emisiones, sea dentro de sus propias fronteras o a través de sus capitales operando en otros territorios. En este sentido, un efectivo mecanismo de financiación para la prevención de desastres no podría estar desligado de una perspectiva de aportaciones diferenciadas entre las naciones y de un llamamiento urgente a revertir las tendencias de recortes a financiamientos de ayuda humanitaria a nivel global.
Además, tal como han exigido quienes se manifiestan en las afueras de la actual sede de la COP, en su mayoría integrantes de comunidades indígenas, un efectivo compromiso socioambiental requeriría de la participación de los pueblos y comunidades en estos espacios, y no sólo de los empresarios y políticos representantes de las naciones. La oportunidad está de nuevo sobre la mesa, y es urgente que los poderes representados en esta conferencia asuman la gran responsabilidad que está en sus manos antes de que sea demasiado tarde.
Mientras tanto, a la ciudadanía global le corresponde la tarea de exigir la adopción y cumplimiento efectivos de los compromisos necesarios y urgentes en favor de nuestro planeta. Sirva este espacio para honrar la memoria de una gran defensora de los derechos humanos, Blanca Isabel Martínez Bustos, fallecida el pasado 10 de noviembre, quien fuera directora del Centro de Derechos Humanos Fray Juan de Larios y referente de la defensa de los derechos fundamentales en México.
México SA
Salinas Pliego: también casinos // Hoy, fallo de la Suprema Corte // “Todo legal; no es persecución”
Carlos Fernández-Vega
▲ El portal bet365.mx es operado por una filial de Tv Azteca bloqueada por la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda a partir de una investigación de lavado de dinero.Foto Captura de pantalla
Como diría el clásico, a lo largo del régimen neoliberal, Ricardo Salinas Pliego no dejó piedra sin labrar, y de ser, en 1981, un simple gerente de importaciones de la tienda de su papá (Salinas y Rocha), a partir de 1993 (ya con Imevisión en el bolsillo y gracias a la “ayuda” de Raúl Salinas de Gortari) mágicamente se convirtió en uno de los escasos multimillonarios autóctonos marca Forbes con negocios en prácticamente todos los ámbitos económicos: comercio minorista, minería, televisión abierta y por cable, telefonía fija y móvil, Internet, energía, finanzas, futbol, industria de las apuestas, fertilizantes y tantos otros, gracias, en buena medida, al Estado (vía concesiones, licencias y permisos) que aborrece, más turbias relaciones políticas y judiciales que le facilitaron escalar de rango económico-social, toda vez que él reconoció: “fui pobre”. Por eso, sin duda, canta con Molotov que hasta 2018 “éramos un país bien chingón”.
El barón de los abonos chiquitos y los intereses de usura opera bajo una premisa: “Entre la patria y el patrimonio, nunca hay duda: primero el patrimonio y después, también”, y en consecuencia hoy se disfraza de “mártir de la democracia”, porque, tras 16 años de sucio litigio, le llegó la hora: este jueves, la Suprema Corte de Justicia de la Nación fallará en su contra, por lo que debe pagar hasta el último centavo de impuestos evadidos desde, cuando menos, 2008, y ya sin la protección de “impartidores de justicia” (como Norma Piña y Luis María Aguilar) y políticos a su servicio.
Y Ricardo Salinas Pliego, ahora declarado ferviente guadalupano, ya no siente lo duro sino lo tupido, porque ya no es sólo la voluminosa evasión fiscal y la gruesa factura que debe cubrir al SAT ni la posibilidad de que termine en una cárcel de Nueva York, sino que ahora acusan a un par de sus empresas (léase casinos) por presuntamente lavar dinero, lo que también son palabras mayores.
Sobre esto último, La Jornada (Dora Villanueva) lo informó así: “La Secretaría de Hacienda identificó 13 casinos donde se detectaron operaciones posiblemente relacionadas con lavado de dinero. ‘Por su alto riesgo financiero’ fueron bloqueados por la Unidad de Inteligencia Financiera ‘para evitar que sean usados por el crimen organizado’ y la Secretaría de Gobernación dispuso la suspensión inmediata de los establecimientos”.
De ese universo, dos son filiales de Tv Azteca (Ganador Azteca y Operadora Ganador Tv Azteca), cuyos permisos (por 25 años, renovables) fueron otorgados en 2018 como un regalo de despedida de Enrique Peña Nieto. Ello es similar a lo que, como secretario de Gobernación, hizo Santiago Creel Miranda, aunque con un matiz: en 2005 y poco antes de dejar esa cartera, otorgó más de 300 permisos para esa actividad (la mayoría a Televisa) como moneda de cambio para que la televisora lo promoviera, “vigorosamente”, en sus pantallas como candidato panista a la Presidencia de la República, algo que, por cierto, se le apestó. Por cierto, “Ganador Azteca también es parte acusada de la demanda que promovieron los acreedores de la televisora en la Corte Suprema del estado de Nueva York” ( ídem).
Y si el de los abonos chiquitos se retuerce y patalea con el pago de impuestos y la posibilidad de visitar la cárcel neoyorquina, entonces la presunción de que en esos dos casinos de su propiedad se lava dinero, pues de plano le da fiebre, y por ello se subió a su barquito de 150 millones de dólares para estar lo más alejado posible de territorio mexicano.
La presidenta Claudia Sheinbaum se refirió al tema Salinas Pliego: “Todas las investigaciones, tanto las que hace el SAT como las que hace la Unidad de Inteligencia Financiera, tienen sustento legal; no hay nada que tenga que ver con un asunto político. Incluso en el caso de la deuda fiscal son asuntos que vienen, algunos, desde 2008. Entonces, todo tiene sustento jurídico, tiene sustento legal”, incluyendo pruebas de lavado de dinero.
Las rebanadas del pastel
Más allá de maquillarse y vestirse como aspirante a Miss Universo, ¿qué hace la “gobernadora” Evelyn Salgado, en qué nube vive?, porque el ignominioso “homenaje” que rindió al asesino y corrupto Rubén Figueroa no sólo es algo inconcebible en un gobierno que dice ser progresista, sino una descarada falta de respeto a las miles de víctimas mortales de este despreciable cacique, represor y una de las cabezas de la guerra sucia en Guerrero. Bien lo advirtió el representante de la coordinadora de comisarios ejidales de esa entidad: “No conocen la historia del estado y todavía tienen el descaro de hacerle ese homenaje”.
X: @cafevega
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