jueves, 12 de mayo de 2022

Sin señales de paz en Ucrania, la ONU se enfoca en salvar a civiles.

Hay mucho por hacer: Guterres
El secretario general del organismo alerta sobre el peligro del hambre
▲ Soldados ucranios apostados en un sistema de misiles antiaéreo cerca de Sloviansk, en el este de Ucrania. En visita a Viena, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, declaró ayer que en el terreno diplomático aún se pueden salvar muchas vidas en el conflicto entre Moscú y Kiev.Foto Afp
Afp, Reuters y Europa Press
Periódico La Jornada  Jueves 12 de mayo de 2022, p. 26
Viena. El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, declaró ayer que si bien en estos momentos no hay oportunidad inmediata de un acuerdo de paz ni un cese del fuego local en Ucrania, el organismo mundial sigue tratando de mejorar las condiciones para millones de personas que sufren los efectos de la guerra.
En una visita a Viena para una reunión de la ONU, Guterres enfatizó que el organismo concentra sus esfuerzos diplomáticos en mejorar las condiciones de vida de los civiles, y ayuda a evacuar a personas atrapadas en zonas de guerra, en coordinación con la Cruz Roja.
Hay mucho que todavía podemos hacer en el campo diplomático para salvar vidas y mejorar la situación humanitaria, declaró Guterres tras reunirse con el presidente austriaco, Alexander van der Bellen.
En otro acto de la cancillería federal de Austria, Guterres admitió estar profundamente preocupado por la posibilidad de la propagación del hambre, ya que la guerra en Ucrania amenaza la seguridad alimentaria en diferentes partes del mundo.
La guerra en Ucrania ha disparado los precios mundiales de los cereales, los aceites de cocina, el combustible y los fertilizantes, y las agencias de la ONU han advertido que el alza de precios agravará la crisis alimentaria en África.
La invasión de Rusia a Ucrania desde febrero ha interrumpido el transporte marítimo en el Mar Negro, una de las principales rutas para los cereales y otros productos básicos, estrangulando las exportaciones de Ucrania y Rusia.
Por su parte, Estados Unidos sigue comprometido con los canales de comunicación abiertos con el gobierno ruso, tanto para promover nuestros intereses como para reducir el riesgo de errores de cálculo entre nuestros países, afirmó la embajada estadunidense tras una reunión en Moscú entre el vicecanciller ruso, Serguei Ryabkov, y el embajador de Washington, John Sullivan.
La cancillería de Rusia informó del encuentro sin dar detalles.

Asesinan a periodista de Al Jazeera durante incursión israelí en Jenin
Fueron disparos palestinos, considera el premier Bennett
La cadena denuncia: fue a sangre fría y acusa a fuerzas de Tel Aviv // Condena internacional
▲ Una colega de Shireen Abu Akleh espera ayuda aterrorizada, mientras un hombre no identificado intenta levantar el cuerpo de la veterana periodista de Al Jazeera, quien fue herida de muerte por disparos en Jenin, Cisjordania reocupada.Foto Afp
▲ Palestinos llevan los restos de la comunicadora hacia la oficina del canal catarí para que sus compañeros presenten sus respetos, en la ciudad cisjordana de Ramalá.Foto Al Jazeera y Ap
Ap, Afp, Sputnik y The Independent
Periódico La Jornada  Jueves 12 de mayo de 2022, p. 24
Jerusalén. La veterana periodista Shireen Abu Akleh, una de las estrellas de la cadena catarí Al Jazeera, murió por disparos de bala ayer, cuando cubría una incursión del ejército israelí en el campo de refugiados de Jenin, en Cisjordania reocupada.
Al Jazeera denunció que la reportera, palestino-estadunidense cristiana, de 51 años, nacida en Jerusalén, fue asesinada deliberadamente y a sangre fría por las fuerzas israelíes; además, calificó el hecho de horrible crimen que rompe las normas internacionales.
La televisora instó a la comunidad internacional a que condene y responsabilice a las fuerzas de ocupación israelíes por atacar y matar a nuestra colega.
La comunicadora fue trasladada de urgencia a un hospital en Jenin en estado crítico, donde fue declarada muerta poco después, a las 7:15 (hora local), reportaron el ministerio palestino de Salud y la cadena catarí, por separado.
El jefe del departamento de medicina de la Universidad Najah, en Nablus, confirmó que la autopsia ordenada por la fiscalía reveló que la periodista recibió un disparo en la cabeza. El cuerpo fue sacado de la universidad cubierto con una bandera palestina, y encima el chaleco que la protegía, para trasladarlo a la ciudad de Ramalá, mientras sus colegas lloraban y sacerdotes cristianos ortodoxos rezaban para despedirla.
El canciller de Qatar, Lolwah Khater, aseguró en Twitter que la corresponsal recibió un disparo en la cara.
Naftali Bennett, premier israelí, afirmó que probablemente murió por disparos perpetrados por palestinos.
Más tarde, el ejército israelí confirmó que realizó una redada durante la mañana en el campo de refugiados de Jenin, bastión de grupos armados palestinos en el norte de Cisjordania, pero negó haber disparado a periodistas.
(El ejército) por supuesto que no ataca a periodistas, sostuvo un mando militar israelí consultado por la agencia de noticias Afp.
En su mensaje detalló que hubo un intercambio de tiros entre las fuerzas de seguridad y sospechosos. Agregó que está investigando el hecho y viendo la posibilidad de que los periodistas fueran atacados por palestinos armados.
Abu Akleh llevaba un casco y un chaleco antibalas claramente marcados con la palabra prensa cuando cubría la redada con otros colegas, testigos de su asesinato. Entre ellos estaba otro periodista de Al Jazeera, el productor Alí Samudi, quien fue herido de bala en la espalda.
Él y otros periodistas presentes en el lugar dijeron que no había combatientes palestinos presentes cuando dispararon contra los representantes de la prensa, y cuestionaron directamente una declaración israelí que hacía referencia a la posibilidad de que se tratara de fuego palestino.
Abrieron fuego sin advertencias
Íbamos a filmar la operación del ejército israelí y de repente nos dispararon sin pedirnos que nos fuéramos o que dejáramos de filmar, declaró Samoudi, citado en el portal de Al Jazeera. La primera bala me alcanzó a mí y la segunda a Shireen, no hubo ninguna resistencia militar palestina en el lugar, detalló.
Horas después, el jefe de las fuerzas armadas, teniente general Aviv Kohavi, pareció retractarse de esa versión, al comentar que no estaba claro quién había disparado.
El ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz, también hizo una declaración cautelosa sobre la responsabilidad del asesinato: estamos tratando de averiguar qué sucedió exactamente, aún no tengo conclusiones finales.
Al condenar este acto, miembros de la comunidad árabe, Estados Unidos, España, la Organización de Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea, China, y el Comité de Protección de Periodistas pidieron una investigación independiente para esclarecer el caso.
El homicidio podría atraer más escrutinio del sistema de justicia militar de Israel, que es objeto de una vasta investigación por crímenes de guerra en la Corte Penal Internacional. Amenaza también con empeorar las ya de por sí tensas relaciones entre el ejército y la prensa internacional.
Tan sólo en mayo de 2021 un ataque israelí que fue anunciado con una hora de antelación, arrasó con la torre Al Jalaa, que albergaba las oficinas de Al Jazeera, la agencia de noticias Ap y la de otros medios de comunicación que tenían base en el lugar.
Abu Akleh era un rostro respetado y familiar en Medio Oriente, conocida por su cobertura en las últimas tres décadas de las duras realidades de la ocupación militar de los palestinos por Israel, que cumple 55 años. Trabajó para la agencia para los refugiados palestinos de la ONU, Radio Voice of Palestine, Amman Satellite Channel, Moftah Foundation y Radio Monte Carlo, hasta llegar a Al Jazeera en 1997.
Entre sus coberturas especiales destacan la segunda intifada, el sitio israelí de Jenin en 2002, la muerte de Yasser Arafat , numerosas incursiones en Cisjordania e intentos vacilantes de encontrar una paz sostenible.
La comunicadora era muy conocida en Cisjordania, y su muerte se sintió en toda la región. El presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, responsabilizó a Israel del asesinato.
En Ramalá, sede del gobierno autónomo palestino, el cuerpo de Abu Akleh, cubierto con una bandera palestina y una ofrenda floral, fue llevado por las calles de la ciudad. Miles de dolientes corearon con nuestro espíritu, nuestra sangre, te redimiremos, Shireen.
Una procesión llevó el cadáver para su entierro en Jerusalén, donde nació Abu Akleh.
En Jerusalén Oriental, decenas de dolientes se congregaron en la casa de la familia para rendirle homenaje. Lina Abu Akleh, la sobrina de la periodista, la llamó mi mejor amiga, mi segunda madre, mi compañera. Nunca pensé que llegaría este día, cuando la noticia sería sobre su muerte, lamentó.
Durante la jornada decenas de personas protestaron en las calles para exigir justicia, pero algunos fueron detenidos al ser replegados por policías israelíes.
Niños palestinos llevaron velas e imágenes de la periodista y las colocaron afuera de la oficina de la cadena de televisión en Gaza.