No más outsourcing ilegal // Evasión fiscal de $500 mil millones
Carlos Fernández-Vega
La cúpula patronal intentó de todo (de la amenaza al chantaje, junto con los partidos políticos afines a la Coparmex), pero de plano no pudo: la iniciativa para reformar las leyes Federal del Trabajo y del Seguro Social en materia de subcontratación ( outsourcing) fue aprobado ayer por las comisiones de Trabajo y Previsión social y de Estudios Legislativos Segunda del Senado de la República.
La iniciativa, presentada en octubre pasado por el senador morenista Napoleón Gómez Urrutia, en esencia propone: impedir abusos fiscales y laborales en detrimento de los trabajadores y de las finanzas públicas; combatir la ausencia de inspección laboral en la materia; evitar el uso de artificios legales para reducir salarios y prestaciones; no precarizar el empleo, erradicar elusión y evasión fiscal o de seguridad social; erradicar la afectación en materia de previsión social; la imposibilidad de que un trabajador tenga jubilación digna (dada su permanente entrada y salida al mercado de trabajo por el outsourcing); la negativa al reparto de utilidades; las empresas virtuales, sin activos; las relaciones simuladas de trabajo; las empresas fantasma y las que desaparecen a los pocos meses de haberse creado.
A la cúpula empresarial no le gustó el proyecto de ley, pues los gobiernos neoliberales la tenían acostumbrada a otro trato. Tampoco a los partidos políticos que la representan en el Congreso (los prianistas no asistieron a la reunión). Y como no sabe participar de otra forma, gritó a los cuatro vientos que los cambios legales afectarán la ratificación del T-MEX y la competitividad de México, cuando por todos es conocido que esta última no es otra cosa que la permanente violación de las leyes laborales y fiscales, y el miserable pago de salarios por medio de la subcontratación.
Se acabó, pues, porque si bien las citadas comisiones ayer aprobaron el dictamen del citado proyecto de iniciativa, en el pleno senatorial Morena y sus aliados cuentan con votos más que suficientes para convertirlo en ley, sin necesidad de recurrir a los partidos políticos que intentaron hacer el vacío. A pesar de ello, Gómez Urrutia dijo que “para nosotros no hay outsourcing bueno o malo, no hay outsourcing positivo o negativo; hay outsourcing legal o ilegal, y por lo mismo esperemos convencer con argumentos a los miembros de los otros partidos políticos que hoy no quisieron participar”.
El Quid de la iniciativa es restituir los derechos de los trabajadores, sobre todo en materia de reparto de utilidades y otros derechos más que les han sido negados a lo largo de todos estos años, y desde luego obligar a todas estas empresas, que han utilizado este sistema, a que regresen a contribuir lo que verdaderamente deberían haber estado cubriendo desde hace mucho tiempo al IMSS, al Infonavit, a los sistemas de pensiones y a otras más. Se trata de supervisar, controlar y vigilar “las operaciones del outsourcing ilegal que prevalece en el país, muy asociado a los factureros, a los que emiten recibos falsos, que cometen fraude, que evaden al fisco y que son delitos”.
El dirigente minero Gómez Urrutia detalló que entre las pérdidas causadas por el outsourcing ilegal se cuenta la evasión fiscal por alrededor de 500 mil millones de pesos a nivel nacional, y cerca de 8 millones de trabajadores bajo este sistema de explotación que no deja de crecer. Sólo en el caso del IMSS se habla de más de 50 mil millones de pesos, que le harían muchísima falta a esa institución para sus programas nacionales de salud”.
Se entiende, pues, por qué la Coparmex está apanicada.
Las rebanadas del pastel
Al comandante Borolas le fascinan los chistes y el más reciente se lo contó al semanario Zeta de Tijuana: México Libre es la única opción que le puede hacer contrapeso al gobierno y eso le preocupa mucho a López Obrador. ¡ Juar, juar, juar! Sus asambleas ni siquiera reúnen a cien personas, pero Felipe Calderón asegura que le preocupa mucho a Andrés Manuel. ¡Qué mello!
cfvmexico_sa@hotmail.com