Napoleón Gómez Urrutia
La semana pasada, del 28 al 30 de noviembre, justo en vísperas del cambio histórico de gobierno, se celebraron las reuniones del Comité Ejecutivo Internacional de IndustriALL Global Union en Ciudad de México, con la presencia de más de 250 líderes mundiales de más de 140 países, que representan a 50 millones de trabajadores. Al mismo tiempo, se desarrollaron las labores del Comité Universal de las Mujeres, quienes en los últimos años se han organizado para defender los objetivos de equidad de género; respeto sin violencia de ninguna clase; igualdad de oportunidades, sueldos y prestaciones para todos, sin distinción del origen, color de piel o el idioma que hablen, ni de sus actividades, y siempre por la reivindicación de sus derechos legítimos.
Este mismo tema fue tratado por la compañera Oralia Casso durante la inauguración de la reunión, donde ella dio a los asistentes, en nombre de las Mujeres de Acero, una cordial y emotiva bienvenida, expresándoles su solidaridad por su lucha internacional en favor del género femenino.
En el contexto actual, las diferencias raciales y de género se hacen más difíciles y complicadas debido a la creciente emergencia de movimientos xenófobos y de extrema derecha que están aumentando en el mundo. Éstos han estado socavando los principios fundamentales de solidaridad entre las y los trabajadores, los cuales pueden ser contrarrestados con base en la sindicalización de las mujeres y en una campaña intensa y permanente contra la violencia femenil.
El Comité Internacional solicitó que se asegurara que la sensibilización sobre el acoso sexual se incluyera en la agenda rutinaria de las y los delegados sindicales. Se señaló que era necesario asegurar medios alcanzables para tener acceso, difundir e intercambiar información, estudios, videos y recursos de formación para sensibilizar a la sociedad sobre el delicado tema del acoso sexual. En algunos sindicatos, un tercio de las mujeres ha sufrido algún tipo de hostigamiento, mientras en otros casos, y de manera aún más sorprendente, se observó que seis de cada 10 menores de 30 años han sufrido alguna agresión sexual. Por todo ello, finalmente el comité acordó celebrar una Conferencia Mundial de Mujeres Trabajadoras, en 2019.
Desde la última reunión del Comité Ejecutivo Internacional de IndustriALL, celebrada en abril del año en curso, la situación política y económica mundial ha evolucionado en forma muy preocupante para la clase trabajadora. Los partidos políticos populistas de derecha neoliberales han seguido ganando terreno en numerosos países. En particular en Medio Oriente, Hungría, Austria, Italia, India, Argentina, Estados Unidos, Suecia y Brasil, entre otros.
Diez años después de la gran crisis global de 2008, el mundo sigue registrando bajas tasas de crecimiento, altos índices de desempleo, creciente concentración de la riqueza y el consecuente aumento de la desigualdad. En las discusiones de la reunión se analizó el hecho de que, por su parte, las empresas multinacionales mantienen demasiado poder y siguen imponiendo a los gobiernos políticas favorables a sus intereses, a las que se suman las prácticas proteccionistas del gobierno estadunidense, que utiliza los aranceles, como en los casos del acero y el aluminio, como amenaza de una guerra comercial con fines geopolíticos.
En los análisis que se presentaron durante las reuniones de IndustriALL en México, se pudo confirmar que en la mayoría de las naciones participantes, la violación de los derechos de los trabajadores y trabajadoras continúa siendo más a menudo la regla que la excepción, y que no sólo es perpetrada por las empresas, sino también por los gobiernos, que actúan en complicidad en la mayoría de las regiones del mundo.
La defensa de los derechos de los trabajadores es la esencia y la razón de ser de los sindicatos, incluida la libertad para crear y afiliarse a organizaciones y realizar la contratación colectiva como un medio para mejorar las condiciones laborales. Se concluyó que el movimiento sindical internacional debe estar siempre dispuesto a ofrecer y manifestar su solidaridad.
De ahí que la lucha por un salario vital es una de las prioridades fundamentales de las asociaciones de trabajadores y también de las estrategias para fortalecer las labores sindicales en todas las cadenas productivas, muy en especial las de suministros mundiales. En los debates se destacó que en los casos de India, México y Turquía, se trata de países de rápido crecimiento y con procesos de industrialización muy diversificados, que se caracterizan por tener baja tasa de afiliación sindical, la difusión del trabajo precario y la violación de los derechos laborales.
Otra importante conclusión de esta trascendental reunión fue que el comercio no debe ser jamás un fin en sí mismo, sino un instrumento que beneficie a los trabajadores y a las sociedades en su conjunto. Utilizada de manera apropiada, la política industrial también es uno de los principales generadores de comunidades prósperas e inclusivas, con un desarrollo económico, social, ecológico y cultural digno de un mundo moderno. En resumen, los problemas globales requieren soluciones globales. Los gobiernos democráticos deben utilizar herramientas y políticas públicas que permitan dirigir la inversión hacia la creación de empleo y de un desarrollo sostenible.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador seguramente enfrentará y superará los retos del desarrollo y la reconstrucción de México. Las experiencias y análisis de IndustriALL así lo hacen previsible.